::: DIOSES Y MONSTRUOS :::


Cuando el Dr Frankenstein logra dar vida a su creación, anuncia el inicio de una nueva era de Dioses y monstruos, la raza humana se eleva a la posición de deidad mientras sus creaturas se arrastran por el fango de lo horrendo y despreciable…

Este interesante film nos propone una visión de los últimos días del director James Whale, famoso por sus películas de terror Frankenstein, la novia de Frankenstein, el hombre invisible , entre muchas  otras;  con una prolífica producción a inicios de la década de los 30; nacido en Inglaterra en el seno de una familia pobre, desempeño oficios como la zapatería y la herrería, en los que se sentía como una “jirafa tratada como un asno”…

En la primera guerra mundial fue alistado como soldado, en donde conocería a su primer gran amor,  pasó parte de su tiempo en un campo de prisioneros alemán, en donde organizó una pequeña compañía entre los presos;
 luego de la guerra se dedico a la actuación y diseño de escenografías, finalmente pudo dirigir la obra de teatro Journey's End, con la que logró el prestigio necesario para viajar a Estados Unidos y dirigir sú versión cinematográfica; posteriormente dirigiría importantes películas como Frankenstein, el caserón de las sombras y el hombre Invisible; con la Novia de Frankeinstein se sella una era de triunfos e inicia su paulatino decaimiento; para muchos esta obra refleja su afán por dejar mensajes poéticos sobre la soledad y el amor, lastimosamente el público solo quería terror y la obra fue pobremente valorada.

La creciente censura y el excesivo control sobre sus films, inició al develarse su homosexualidad y le valió un temprano retiro de la dirección fílmica en 1941; Dioses y Monustruos marca un interesante paralelo entre la vida de James y la de su monstruo, ambos en búsqueda de una compañia ideal y victimas de una profunda soledad e incomprensión, una interesante reflexión sobre las verdaderas necesidades de la humanidad; James escribiría en su nota de suicidio “Mi vida ha sido maravillosa”  tan maravillosa como lo fueron sus obras y como este último  homenaje a un hombre que dio vida a un nuevo mundo de “Doises y Monstruos”.

"Obra maestra, dolorosa y épica obra de arte, implacable y piadoso retrato de la soledad" (Carlos Boyero: Diario El Mundo) 
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"Excepcional" (Ángel Fdez. Santos: Diario El País)
 
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"Memorable McKellen" (Carlos F. Heredero: Cinemanía)
 
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"Bello relato. Cálido y conmovedor homenaje que recrea la vida del director James Whale. La interpretación de Ian McKellen es una cumbre de la interpretación contemporánea. A su lado, el reparto se crece: Fraser -también productor- borda su papel" (M. Torreiro: Diario El País)
 




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